El pasado sábado 30 de marzo, decidimos visitar restaurantes españoles en Sopot y Gdynia, para comparar y opinar. Quisimos ir a cuatro restaurantes: Tapas de Barcelona, Pueblo, Espléndidos y The Mexican.
      Primero fuimos a Tapas de Barcelona. Es un nuevo restaurante situado en el centro de Gdynia. El restaurante cuenta con las típicas tapas españolas, así como una gran selección de vinos españoles. Y fueron esas tapas las que fuimos a probar. Ola pidió patatas bravas - fritas dos veces. Eran patatas ordinarias pero con una salsa deliciosa. Fue un maridaje excelente. Ksawery pidió dátiles con tocino. El plato vino con dos salsas. En general estaba muy sabroso, pero la porción fue demasiado pequeña. Yo pedí empanadillas de carne de cerdo y frijoles. Estaban muy sabrosas y fueron excelentes. A pesar de su tamaño, nos abrió el apetito. Ola y Ksawery pidieron sangría, que es típica de España, y se compone de vino y frutas. Por desgracia, todos estuvimos de acuerdo en que el servicio fue bastante desagradable y el precio en relación con la comida fue demasiado alto.
      El siguiente punto de nuestro viaje fueron los restaurantes Pueblo y Espléndidos. Por desgracia, cuando llegamos, resulta que no había mesas libres, lo que indica la popularidad de estos restaurantes. El camarero nos dijo que podíamos esperar incluso hasta dos horas por una mesa libre, así que tuvimos que renunciar a estos lugares, y nos fuimos hasta la última parada programada.
      El restaurante The Mexican está situado en el centro de Sopot, en la calle Bohaterów Monte Casino. La primera sorpresa fue su interior. A primera vista era un restaurante normal de México. Sin embargo, después de un detenido estudio, se puede notar un uso muy creativo de objetos simples, tales como, por ejemplo, las botellas vacías de cerveza. No tuvimos problema con la mesa porque el salón es muy grande. También fue una sorpresa agradable tener nuestro propio camarero y la música. De fondo se pudo escuchar éxitos como canciones de Ed sheeran y Frozen en versión en español. En la cuestión de la comida tuvimos opiniones divididas. Ksawery pidió tacos con pollo y habichuelas. La carne estaba perfectamente condimentada y taco no se desmigajó. Una vez más, la porción fue demasiado pequeña, pero aún asi fue sabrosa. Ola pidió palitos de pollo que estaban empanados en nachos crujientes. Venían con patatas fritas y ensalada Coleslaw y salsa tejana. El plato fue simple porque, normalmente, es para niños, pero fue sabroso. Yo pedí una enchilada de ternera. Por unanimidad decidimos que mi plato era el mejor. La carne de cerdo estaba muy bien sazonada con el arroz con salsa estaba muy bueno. Otra sorpresa agradable fueron las bebidas. Todos pedimos margaritas. Sin embargo, cada uno de nosotros de un sabor diferente: Ola, una de mango, Ksawery una de toronja y yo una de fresa. El margarita de mango fue el mejor.
     

En conclusión, pudimos visitar sólo dos restaurantes, pero duró todo un día. A pesar de esto, todo salió bien.